El Tapón del Darién y el
negocio de inmigración ilegal
¿Qué es el Tapón del Darién?
Darién Gap (Darién Buffer) es una región en la frontera entre Panamá y Colombia, donde el cruce realizado principalmente por migrantes de Sudamérica y el Caribe es peligroso. El lugar es elegido por estos caminantes para iniciar su viaje hacia su objetivo final: la frontera sur de los Estados Unidos de América. En general, la gente acude a este punto remoto y lejano de su destino porque recientemente, bajo la presión estadounidense, muchos países centroamericanos comenzaron a dificultar el ingreso de migrantes a sus territorios, especialmente a los provenientes de África y Asia. Aún así, se estima que unas 400.000 personas cruzarán este terreno sólo en 2023.
Peligros
Al ser una región extremadamente húmeda y calurosa, el denso bosque se encuentra prácticamente deshabitado por humanos, siendo hogar de pequeños grupos conformados por pueblos indígenas. Sin embargo, estas condiciones abióticas dejan el lugar perfecto para la proliferación de insectos, animales venenosos, reptiles e incluso mamíferos feroces. Otro factor que dificulta este paso es el terreno, generalmente embarrado debido a las frecuentes lluvias torrenciales, siendo habituales los episodios de desprendimientos y enterramientos. Sin embargo, el factor más aterrador son los ejércitos revolucionarios y los grupos traficantes que controlan la región, que comúnmente matan, abusan sexualmente, extorsionan o secuestran a personas que intentan cruzar para recuperar sus pertenencias e ideales.
Mercado sucio
Estos grupos son sólo una parte de la cadena productiva que enfrenta esta situación de crisis humanitaria. Desde Colombia, de donde provienen, estas personas son sometidas a situaciones de riesgo extremo en busca de su sueño, lo que permite la explotación por parte de los ciudadanos locales. Se producen ventas de material de acampada a precios estratosféricos, incumplimiento del valor del contrato de cruce, traslado de insumos de procedencia no sanitaria e incluso “guías” de cruce, que muchas veces son coaccionados por grupos armados locales a cobrar cantidades fuera de lo pactado. como una forma de “peaje” para cruzar la región. La población local por donde pasan estos aventureros prospera rápidamente, lo que lleva a que cada vez más gente participe del lado de los postores, atraídos por el beneficio de la desesperación.
Destino improbable
Incluso después de estas terribles condiciones, cuando llegan a asentamientos organizados en Panamá, rara vez son recibidos con agua potable o atención básica, porque el gobierno local no tiene los fondos para recibirlos o incluso deportarlos. También son desanimados por las organizaciones locales, financiadas por los EUA, siempre señalando que después de la primera frontera cruzada, quedan al menos seis más hasta la ubicación esperada.
Es un camino desafortunado para todos los que se ven obligados a recorrerlo, pero no engaña con su aparente pobreza y falta de estructura: es un mercado más creado bajo la rentabilidad del tráfico, la insostenibilidad financiera local y, en rigor, el factor de persistencia de los seres humanos.
Por Gabriel Souza em 03/11/2023
Fuentes